Mito y cine negro
En Alphaville (1965), Jean-Luc Godard construye un escenario social futurista en donde la ciudad, como entorno de una realidad automatizada, ha llegado a tal punto de higienización, que ha perdido todo tipo de rasgo propio. Los espacios que retrata Godard se caracterizan por su neutralidad: lobbies y cuartos de hotel, estacionamientos, pasillos de oficina, salones de
↧